¿Qué tinta se usa para los tatuajes?
Es de suma importancia saber qué tinta se usa para los tatuajes, tanto para clientes como para artistas, por un gran número de factores. Este aspecto juega un papel fundamental para que los diseños que representan a las pieles que los visten, se adapten a la perfección a la idea inicial y encajen perfectamente con el concepto que el cliente tenía antes de hacérselo.
Los tatuadores usarán los colores para complementar los diseños y darle un toque especial al tiempo que les hacen cobrar vida, mientras que las personas que deciden hacerse uno deben saber qué tinta se usa para los tatuajes, entre otras cosas, por posibles alergias como la dermatitis o reacciones a algunos materiales.
La tinta, el color de los tatuajes.
Hay infinidad de diseños, formas, contornos, ideas por representar, emociones y otros muchos aspectos comunes a los tatuajes y cuyo único denominador común es la tinta. Ya sea negra o de color, para el artista su composición es muy importante a la hora de saber cómo tolera la piel sus diferentes elementos y que materiales y técnicas han de usarse para que el dibujo sea lo más parecido posible a la idea del cliente.
Lo primero que hay que conocer en este ámbito, es que la tinta negra se diferencia del resto, además de por el color obviamente, por sus componentes puesto que no tiene apenas químicos, mientras que el resto de tintas de la paleta están formadas por estos elementos que aportan unos u otros tonos en función de la reacción química que generan. El negro está formado en su mayor parte por una base de carbón sin apenas partículas metálicas. Por ello es la tinta que menos problemas provoca, ya que cualquier persona, ya sea alérgica o aquellos que tienen la piel sensible, lo asimila bastante bien.
¿Cómo se crean los colores de las tintas para tatuar?
En cuanto a cómo se crea el color de los tatuajes, debes saber que todos, menos el negro, se crean a partir de mezclas de elementos químicos como óxido de zinc para el blanco, magnesio para el morado, cadmio para el amarillo y hasta mercurio para el rojo. Con esto en mente, también te será de utilidad preguntarle al tatuador si alguno de los colores que le has propuesto para complementar tu diseño tendrá algún tipo de repercusión sobre tu cuerpo en caso de que tengas algún tipo de dermatitis. En el caso de que no supiese responderte, no dudes en acudir a un dermatólogo y que puedas solucionar así todas las dudas que puedan surgirte.
Tu piel es importante y tu salud aún más, con lo que si tienes alguna duda de qué tinta se usa para los tatuajes y su composición y posibles efectos sobre ti, no dudes en hacer todas las preguntas necesarias, e incluso si es necesario cambiar tu tatuaje o adaptarlo para evitar usar un color conflictivo, hazlo. Al fin y al cabo, plasmar una idea sobre tu cuerpo debe ser algo memorable y simbólico, no doloroso e incómodo.
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